El Xantolo es una tradición viva que se celebra en la Huasteca y en la Sierra hidalguense, considerada la fiesta más grande del Día de Muertos en Hidalgo, en la que se integran grados distintos de ritualidad que muestran valores culturales de los pueblos originarios mezclados con las creencias religiosas hispanas.
Como parte de esta celebración, en los municipios de San Felipe Orizatlán, Huejutla y Yahualica, los turistas nacionales y extranjeros apreciaron las danzas, cantos y platillos típicos que forman parte de la celebración de esta celebración de origen prehispánico en que las ánimas de los difuntos regresan al mundo de los vivos para convivir con los familiares y para nutrirse de la esencia de los alimentos que se les ofrece en los altares puestos en su honor.
Después de que se suspendieran las actividades masivas de esta festividad durante 2 años a consecuencia de la pandemia, la edición 2022 del Xantolo se caracterizó por la devoción, el esmero y la unión de los habitantes de los municipios y comunidades que recibieron a sus familiares y amigos que ya no se encuentran con ellos.
El 31 de octubre recibieron a los pequeños difuntos, también llamados angelitos, a quienes les ofrecieron juguetes, dulces, chocolates y detalles infantiles, además de la comida que más les gustaba. Mientras que el 1 de noviembre es día de Todos los Santos y el 2 de noviembre es la llegada de todos los Fieles Difuntos halagados con cohetes, flores, veladoras encendidas y rezos.
Mientras que en Ixmiquilpan, el corazón del Valle del Mezquital, se realizó el primer concurso de elaboración de tapetes para conmemorar el Día de Muertos, donde los participantes diseñaron tapetes con flores de cempasúchil, formó diferentes figuras como: calaveras e imágenes representativas de la cultura hñahñu.
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