Encontrar una vivienda en México se ha convertido en un imposible gracias a los precios de casas y departamentos que se habían visto en 14 años, esto debido al alta demanda , escasez de oferta y carestía de materiales de construcción.
En el país el alquiler promedio subió 3% en este año, mientras que el precio de inmuebles subió 2.9%, según el INEGI.
Imaginense, sobrinitos, la renta y venta de casas no se había encarecido tanto desde el año 2008.
Y es que el rezago habitacional, necesidades de vivienda insatisfechas, baja calidad del parque habitacional y alta demanda han provocado el alza en los precios.
Pues 2022 fue un año lleno de retos y adversidades económicas que se caracterizó por una alta tasa de inflación y mayores tasas hipotecarias.
Aparte de que las materias primas e insumos para la construcción encarecieron este año, entre ellos el cemento y el acero.
Los costos tuvieron este subidón debido al trabajo online y la valoración de la vivienda, que es mayor luego de la pandemia.
En el caso particular de la CDMX, la expansión de los nómadas digitales, específicamente migrantes gringos ha generado un alza en alquileres y desplazamiento de los locales.
Ya que estos han optado por el esquema de alquileres vacacionales a largo plazo, como los que ofrece Airbnb.
Leonardo González, analista de Real Estate de Propiedades.com, considera que las tasas hipotecarias tenderán al alza en 2023.
De acuerdo con información de Banxico el costo anual total (CAT) de los créditos hipotecarios fue de 13.5% en octubre pasado y fue el más alto en la última década.
Las viviendas con crédito hipotecario en México tuvieron un precio promedio de un millón 531 mil pesos en septiembre pasado.
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