Ante la nueva ley que permite el uso de la marihuana para uso médico y lúdico, el gremio de Obispos de la Provincia Eclesiástica de Hidalgo, expresó su oposición moral y ética respecto a la decisión de las autoridades, la cual señalaron no soluciona el problema de la drogadicción ni del narcotráfico.
Ante la ley aprobada por el Senado de la República, los obispos exhortaron a las autoridades estatales de educación y salud a proponer campañas de información acerca de las adicciones y de las consecuencias de los narcóticos, con el fin de generar conciencia y acciones responsables.
“Vemos una señal de una política de Estado que ignora al débil y descarta a quienes deberían ser más tutelados. La legalización de un estupefaciente sea este u otro, significa voltear la vista e ignorar las necesidades reales de la sociedad, y más aún en el contexto actual de la pandemia de COVID-19, la crisis económica y la crisis de inseguridad”, manifestaron en un comunicado.
Además, los obispos de la Provincia Eclesiástica de Hidalgo exhortaron a los hidalguenses a poner atención en las consecuencias nocivas para la salud que afectarían el bien común de las familias y de la sociedad.
Asimismo, la Iglesia llamó a los jóvenes a no dejarse llevar por la permisividad que permite “narcotizar a la ciudadanía”.