El inicio de la sesión solemne de la toma de protesta de Sergio Baños Rubio como presidente municipal de Pachuca, fue interrumpido por el excandidato de Morena, Pablo Vargas González, quien pretendía tomar el micrófono para manifestar su inconformidad por los resultados electorales del pasado 18 de octubre, mismos que no le favorecieron.
El morenista citó una hora antes de la toma de protesta a sus simpatizantes en el monumento a los Niños Héroes, el cual se encuentra a unos metros del Reloj Monumental de Pachuca, lugar donde se realizaría el acto protocolario. Ante los asistentes a su llamado, manifestó que tras el fraude electoral entraría una autoridad espuria al ayuntamiento de la capital hidalguense.
Después de su mitin, Pablo Vargas intentó entrar al lugar junto con un grupo de simpatizantes, lo cual les fue negado debido a que no contaban con una invitación. Posteriormente, en más de una ocasión le solicitaron al ahora regidor de Pachuca que ingresara al recinto para que rindiera protesta como regidor; sin embargo, se negó a ingresar.
Tras entrar al recinto, el académico en más de una ocasión intentó tomar los micrófonos para interrumpir el acto protocolario, impedir la toma de protesta del alcalde electo y denunciar lo que él considera un “fraude electoral en contra de Morena y del presidente Andrés Manuel López Obrador”; fraude que según Pablo Vargas, se realizó mediante la coaptación de los tribunales estatales y federales, por lo que su dictamen no legitima la elección.
Finalmente, tras su fallido intento de interrumpir el evento y de que el alcalde Sergio Baños rindiera protesta, Vargas González se retiró del recinto y no tomó protesta como regidor, a pesar de que había anunciado ante sus simpatizantes que sí lo haría, para representar a los más de 30 mil votantes que confiaron en él e impulsar lo que llamó una ciudad de derechos.
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