Tras la suspensión de viajes desde y hacia el (R.U) Reino Unido por parte de múltiples países europeos por la aparición de la nueva cepa de COVID-19 en el país británico, el intercambio comercial con la isla también se detuvo.
Frente a las previsiones iniciales de las autoridades británicas de que podían llegar a acumularse unos 2.500 camiones, al final han resultado ser unos 4.000 los que aguardan su turno, según el Gobierno británico, o unos 8.000, según la Asociación de Transportistas por Carretera.
Los camiones de carga quedaron atrapados en el puerto de Dover; y eso ha ocasionado que los transportistas, quienes no pueden moverse, muestren su hartazgo. Desde el lunes ya ha habido confrontaciones con la policía.
TV en Directo | El tráfico entre Francia y el Reino Unido se reanuda con lentitud tras el cierre por la nueva cepa del virus, y ante el enfado de muchos de los 4.000 camiones https://t.co/S3fUT0YiJ6 https://t.co/ou2gFUP9hx
— EL PAÍS (@el_pais) December 23, 2020
Se prevé que tras la aplicación de pruebas rápidas, los camiones puedan completar sus entregas en los próximos días. El ejército británico se ha desplegado para colaborar en la realización de los test; aunque el ministro de Vivienda británico, Robert Jenrick, reconoció en la cadena Sky News que el atasco continuará aún varias jornadas.
Al menos hasta el próximo 6 de enero, solo podrán entrar en Francia los conductores de camiones y los ciudadanos o residentes franceses y de la UE con una razón esencial para viajar que muestren un resultado negativo en la prueba de COVID-19 con menos de 72 horas de antigüedad.
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