A dos años de la tragedia ocurrida el pasado 18 de enero del año 2019 en la comunidad de San Primitivo, municipio de Tlahuelilpan, Hidalgo; donde debido a la extracción ilegal de combustible de un ducto de PEMEX, ocurrió una explosión en la que perdieron la vida 137 personas. 194 menores quedaron en situación de orfandad, mismos que ahora viven con personas de su red familiar.
El padre o madre sobreviviente, abuelos, padrastros y tíos son las personas que se hacen cargo de los 194 niñas, niños y adolescentes que quedaron en situación de orfandad.
De acuerdo con datos del Sistema DIF Hidalgo, seis menores están a cargo del padre, 175 a cargo de la madre, cuatro a cargo de los abuelos, dos a cargo del padrastro y siete a cargo de los tíos.
En el reporte se destaca que en todos los casos hubo un círculo familiar que se encargó de los menores, por lo que no fue necesario decretar una medida urgente de protección especial consistente en su ingreso a un centro de asistencia social dependiente del Sistema DIF Hidalgo.
Los menores son originarios de diferentes municipios como Mixquiahuala, Ajacuba, Tepetitlán, Atitalaquia, Tetepango, Tezontepec de Aldama, Tlahuelilpan y Tlaxcoapan, así como de Uruapan Michoacán y del país de Guatemala; de los cuales, huérfanos de padre hubo 69 niñas, 70 niños y 36 adolescentes; 16 huérfanos de madre consistentes en tres niñas, nueve niños y cuatro adolescentes; tres huérfanos de ambos progenitores de los cuales una es niña, y dos niños.
La Procuraduría de Protección de Niñas, Niños, Adolescentes y la Familia del Estado de Hidalgo inició tres procedimientos jurídicos y uno administrativo, a través de la Subprocuraduría de Protección de Niñas, Niños, Adolescentes y la Familia del Distrito Judicial de Tula de Allende, Hidalgo; dos son de guarda y custodia, un procedimiento especial de concubinato post mortem, y un administrativo consistente en la acreditación de la doble nacionalidad de un niño.