Para celebrar el amor en cualquier época del año, República Checa tiene algunos de los mejores escenarios para hacerlo. Hoy, te presentaremos una pequeña muestra de experiencia inolvidables que los enamorados pueden vivir en este maravilloso país.
Lujos y Spas dignos de reyes.
Conoce Karlovy Vary, la joya del wellnes de la República Checa.
Una perfecta personificación de la elegancia europea, columnatas ostentosas, spa’s exclusivos y una situación geográfica espléndida en medio de un valle cubierto de bosques. Esta es la ciudad-spa de Karlovy Vary.
La ciudad más importante del famoso triángulo de los balnearios, en la que recibían tratamiento las personalidades más célebres de la vida artística y social de Europa, es hoy el segundo lugar más visitado de la República Checa. Por su arquitectura original, es uno de los balnearios más hermosos del viejo continente.
El romance en la Praga Moderna
Karlin es uno de los barrios vibrantes y con más feeling urbano de la capital checa. Hasta finales del siglo pasado era un barrio industrial que no atraía a los turistas ni a los locales. Después de las catastróficas inundaciones de 2002, el barrio resurgió de sus cenizas.
En lugar de los edificios afectados, se construyeron otros modernos que le dieron al barrio un nuevo impulso. Hoy es una zona de nuevas tendencias, que a veces recuerda a Berlín. Tiene anchos bulevares, edificios modernistas restaurados, restaurantes y cafeterías hípster, parques y construcciones industriales reconvertidas en centros culturales. Y sobre el barrio se eleva el monte de Vítkov, con su monumento y sus hermosas vistas.
Aventura romántica en el Río Elba
La ruta del Elba comienza en Alemania, donde se conoce como Elberadweg. Cuando decimos que es conocida, realmente queremos decir que es muy conocida, ya que nos referimos a uno de los caminos en bicicleta más populares de todo el país y más allá de sus fronteras. En la República Checa este camino se ha popularizado mucho entre las familias con niños.
Es difícil decir cuál de los enclaves históricos o de los fenómenos naturales de la Ruta del Elba es el más hermoso. Todo depende de los gustos de cada ciclista. Pero es seguro que la última fase de la Ruta del Elba en la República Checa tiene algo que ofrecer a todo el mundo. El río fluye por el paisaje único en el mundo del Parque Nacional de Suiza Checa, compuesto por torres rocosas, puertas y cañones, ciudades rocosas y laberintos. La perla de la Suiza Checa es la Puerta Pravčická, un gran arco de arenisca que forma el mayor puente de piedra natural de Europa.
La última parada de la Ruta del Elba en la República Checa es Hřensko, la puerta de entrada al parque y que ofrece populares enclaves turísticos como el cañón del Elba o paseos en barco por profundos desfiladeros. Hřenskoes el pueblo más bajo de la República Checa, pero gracias a las temperaturas, que esta enorme masa rocosa mantiene suaves incluso en verano, la fauna prospera en esta altitud como en ningún otro lugar del mundo.
Imágenes cortesía www.destinochequia.com