Las consecuencias que puede traer la aplicación de la reforma eléctrica o ley combustóleo son muchas y son graves. De entrada, pondría en jaque actividades económicas que generan el 14% del PIB en México.
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Así como lo escuchan. De cancelarse los permisos de autoabasto eléctrico (para empresas privadas), la generación de energía se encarecerá para numerosas industrias.
El costo promedio del fluido en México, oscila entre un 44 y 48% más alto respecto a Estados Unidos, la diferencia se hace más grande en comparación con estados como Texas.
La CONCAMIN indicó que numerosas empresas, encargadas de generar el 14% del PIB mexicano experimentarían altos incrementos de precio en la generación de energía.
En el mes de febrero, el sector industrial de México, ya reportó tarifas eléctricas más altas, en promedio 44 y 84% más altas que lo que se paga en Estados Unidos.
Los costos de generación promedio de la CFE, quien produce casi el 55% de la electricidad en el país, son hasta 60% superiores a los de productores independientes.
Por otra parte, la Comisión Reguladora de Energía indicó que el costo de la luz generada por la CFE, es 27% más alto debido a que:
- Opera con un equipo, maquinaria e insumos obsoletos.
- Utiliza carbón y combustóleo.
La llamada Ley Combustóleo, permitiría que el primer despachador de energía en el país sea la CFE, misma que genera la mayoría de su energía con plantas termoeléctricas a carbón.
Bonita manera de iniciar el primer trimestre del año. El año que se supone sería de recuperación económica, inicia con una ley que pone en jaque el 14% del PIB en México.