El secretario de Salud de Hidalgo (SSH) Alejandro Efraín Benítez Herrera, reveló que María S. G., de 75 años de edad, quien falleció 45 minutos después de que le aplicaran la vacuna contra el COVID-19 de la farmacéutica china Sinovac, falleció por un problema cardiovascular y no por anafilaxia asociada a la inoculación.
En entrevista radiofónica, el titular de la SSH informó que esta es la conclusión de una asociación causal, inconsistente con la vacunación, la cual solo coincide con el momento de la inoculación de acuerdo con los estudios realizados por parte de un grupo de expertos.
Benítez Herrera resaltó que el resultado de la necropsia y de los estudios anatomopatológicos que se realizaron a todos los órganos de la septuagenaria fenecida mostraron que la mujer tenía un corazón dañado con hipertrofia, sobre todo en las cavidades derechas, con una alteración en válvulas cardíacas y con los ligamentos dañados con placas de calcificación o alteromas, por lo que no se encontró nada que pueda relacionarse con la vacunación.
Indicó que las otras comorbilidades que presentaba la mujer como hipertensión, diabetes, enfermedad pulmonar obstructiva y obesidad, tampoco tuvieron relación con su deceso.
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