Durante siete días una importante labor de limpieza se ha realizado en la cabecera municipal de Tula, apoyada por una fuerza de trabajo de mil 35 servidores públicos y 51 unidades de maquinaria pesada.
Tras la inundación del lunes 7 de septiembre, hoy los servidores públicos se encontraban en las calles retirando los escombros y lavando calles, banquetas y viviendas, al igual que locales comerciales, escuelas y centros comerciales.
“Apoyados con pipas de empresas privadas, de las tres instancias de gobierno y con manos más de la sociedad civil, se logró ya contabilizar un 85 por ciento de superficie limpia”, informó el presidente municipal Manuel Hernández Badillo.
Precisó que 140 empleados de la Presidencia Municipal de Tula, 270 del Gobierno del estado de Hidalgo y 400 elementos de la SEDENA participan en estas tareas.
Tras reconocer la valía del trabajo que están realizando grupos organizados de ciudadanos, Hernández Badillo, reconoció la solidaridad que existe por parte de los beneficiarios, quienes hacen muestras constantes de agradecimiento.
El alcalde refirió que Tula está viviendo momentos especiales, al concluir la etapa de salvamento y se habrá de iniciar, en breve, la reconstrucción del equipamiento urbano, de las viviendas destruidas, de los campos de cultivo siniestrados, para dar paso al regreso a la normalidad.
Refirió que, hasta el momento, según el avance de los conteos, al menos 2 mil 600 personas resultaron afectadas en sus bienes y muchas de ellas no podrán regresar a sus viviendas pronto.
Respecto a la nueva etapa, Hernández Badillo comentó, que también se habrán de establecer nuevas medidas preventivas para evitar que los niveles del río pasen desapercibidos cuando se han extralimitado por cualquier tipo de circunstancias o eventualidad climatológica.
Y destacó que se requiere del apoyo del gobierno de la República, del gobierno estatal y de los legisladores para que sean destinados los recursos suficientes para enfrentar esta grave crisis.
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