Rosario Robles, exsecretaria de Desarrollo Social en el Gobierno de Enrique Peña Nieto, descartó inculpar al expresidente mexicano a cambio de beneficios procesales.
“Me pedían concretamente que incriminara a personalidades del Gobierno anterior y yo por supuesto no estoy dispuesta a incriminar a nadie en situaciones que son absolutamente falsas”, mencionó.
Recordemos que se encuentra en prisión preventiva desde 2019 por el caso de corrupción conocido como la “Estafa Maestra”.
Un juez de control dictaminó que la exfuncionaria deberá continuar su proceso penal tras las rejas, por el delito de ejercicio indebido del servicio público.
Afirmó que no se siente derrotada sino triste tras la decisión de un juez de control. Debido a que determinó mantener la medida cautelar de prisión justificada en su contra.
Una investigación periodística publicada en 2017 reveló que Rosario Robles, habría permitido el desvío de fondos públicos por más de 5,000 mdp.
Todo esto a través de universidades y empresas fantasma.
Su caso contrasta con el del exdirector de Pemex en el Gobierno anterior Emilio Lozoya, quien fue extraditado a México y afronta en libertad sus dos causas de corrupción gracias a un acuerdo con la Fiscalía por el cual incriminó a Peña Nieto y a medio centenar de políticos.
Sobre los dos años que lleva encarcelada dijo que ha sido un tiempo “de un profundo dolor” por no estar con su familia.
Dijo que este tiempo en prisión le ha servido para aprender mucho de sí misma, pero también ha analizado mucho la situación por la que está pasando.