La economía mundial atraviesa momentos complicados, lo que obviamente ha ocasionado estragos en el territorio mexicano, siendo la inflación uno de los ejemplos más claros en las últimas semanas. Aunque, independientemente de eso, hay otros factores internos que ponen en riesgo la economía del país.
La reforma eléctrica que AMLO tiene planeada sería un factor de riesgo en las inversiones, ya que estas modificaciones dejarían fuera a los principales inversionistas, situación que preocupa a empresarios y consultores por igual.
José Medina Mora, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), comentó que la caída del 8.3% en el PIB durante 2020, ha sido la más profunda en situaciones de crisis, así que si no existen condiciones para mejorar el ambiente de negocios, el país perderá muchas ventanas de inversión.
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“A pesar del rebote que experimentamos, ya podemos sentir que se detuvo esa inercia. No vamos a poder recuperar la caída del 8.5% con el crecimiento de este año, tampoco entonces lo podríamos hacer con el 3% que se espera para el 2022”, infirió José Medina durante el Foro Cumbre de las 1,000 empresas más importantes de México.
“El mayor riesgo que existe en específico la iniciativa de la reforma eléctrica, eso podría desincentivar mucho la inversión, tiene muchos impactos en materia del mercado eléctrico, pero el impacto inmediato sería México como destino de inversión, ya no se vería tan atractivo”, afirmó.
