Nueva Zelanda tiene entre manos un plan que a nadie antes en el mundo se le había ocurrido para evitar la compra de cigarros en su territorio y tienen pensado lograrlo instaurando una nueva ley que modifica constantemente la edad mínima para comprar y consumir tabaco.
La idea es conseguir generaciones totalmente limpias de tabaco, y aunque el plan está contemplado para tener resultados reales en al menos 50 años, parece ser una buena ofensiva al cada vez más constante consumo de tabaco, ya que en este país el tabaco es la causa de fallecimiento de hasta 5 mil personas al año, lo que representa el 15 por ciento de la mortalidad total.
El ambicioso plan del Ejecutivo laborista de la primera ministra Jacinda Ardern consiste en una nueva legislación que aumentará la edad legal para fumar, la cual en este momento se encuentra en los 18 años. Dicha legislación entraría en vigor hasta 2026, pero con cada año que pase, la edad mínima para consumir cigarros irá en aumento.
De funcionar este modelo, se prevé que en 65 años, la edad mínima para comprar tabaco y consumirlo sea de 80 años. “Queremos asegurarnos de que los jóvenes nunca comiencen a fumar, por lo que convertiremos en delito vender o suministrar tabaco a nuevas generaciones de jóvenes. Las personas que tengan 14 años cuando entre en vigor la ley nunca podrán comprar tabaco legalmente”, señaló la viceministra de Sanidad, Ayesha Verrall.
También te puede interesar: Llama la presidencia de Tula a extremar precauciones para evitar incendios
A esto se le sumaría la disminución de establecimientos en donde poder adquirir tabaco y estos tendrán un nivel muy bajo de nicotina, legislación que entraría en 2022. Este plan busca reducir en un 5% el número de fumadores actuales que existen en Nueva Zelanda para 2025.