Derivado de un operativo de supervisión sanitaria en el que participaron diversas instancias de la presidencia municipal de Tulancingo, un conductor de una unidad de transporte público, la cual viajaba con sobrecupo de pasajeros, fue detenido por no respetar y negarse a acatar las medidas biosanitarias.
La detención se realizó con base a lo establecido en el artículo 215 del Bando de Policía y Gobierno, el cual fue modificado en 2020, luego de que el conductor hizo caso omiso a cumplir con las medidas establecidas para contener y prevenir la propagación del COVID-19, mismas que establecen que la unidad opere al 80 por ciento de su capacidad, por lo que al circular con sobrecupo la “combi” fue remitida al corralón.
La directora de Movilidad y Transporte de Tulancingo, Berenice Osorno Rodríguez, informó que el operativo se realizó se diversos puntos del municipio en conjunto con elementos de Seguridad Pública, de la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Hidalgo (Copriseh), así como personal de Reglamentos y de la dirección de Sanidad Municipal.
Osorno Rodríguez detalló que en dicho operativo se revisaron 300 unidades del servicio público en las que se detectó a varios pasajeros y operadores que no cumplían con las disposiciones sanitarias, por lo que fueron exhortados a seguirlas.
Finalmente, la funcionaria municipal anunció que estas medidas de supervisión se realizarán en diversos puntos de Tulancingo, acompañados de las demás instancias municipales que tienen injerencia en la contención de la movilidad y los aforos en los diversos lugares, como es transporte público y los comercios.
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