Anoche damnificados de la inundación de septiembre en el municipio de Tula de Allende hicieron una quemazón de colchones. Al menos 80 piezas que les entregó el gobierno municipal fueron abiertos para verificar que son reconstruidos y luego se les prendió fuego.
Inicialmente, la protesta que encabezó Berenice Pecina de La Gran Asamblea de Damnificados consistía en llevar a la alcaldía los colchones para que el alcalde Manuel Hernández Badillo les diera una explicación sobre su adquisición, y al lugar llegaron al menos un centenar de beneficiarios.
Pero como estuvieron en el lugar al menos una hora y ningún funcionario salió decidieron radicalizar su protesta quemando algunos colchones, pero al final terminaron quemándose todos en las dos entradas de la alcaldía.
Tras denunciar falta de empatía por parte del gobierno municipal exigieron la intervención de la Secretaría de Salud, pues aseguran que los materiales con que fueron reconstruidos son de desecho y los convierten en verdaderos focos de infección y muchos de los que estaban utilizando los colchones refieren tener afecciones por probables picaduras de insectos que estaban alojados dentro.
Por la desesperación de que las autoridades les dieran respuestas, algunos ciudadanos trataron de evitar la salida de funcionarios municipales y se generó un enfrentamiento con policías intercambiando golpes.Los damnificados se retiraron advirtiendo que continuarán con sus protestas.
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Fotos: Aires de Hidalgo
