A dos años de que el cuerpo de Sandra fue localizado en el canal de una presa en el municipio de Tasquillo, la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo informó de la vinculación a proceso del presunto feminicida de la mujer de 35 años que fue reportada como desaparecida el 15 de diciembre de 2019 en el municipio de Ixmiquilpan.
En un mensaje vía redes sociales, el procurador Alejandro Habib Nicolás detalló que tras su desaparición se activaron los protocolos de búsqueda del feminicida correspondientes y fue el 23 de febrero que la Policía Municipal de Tasquillo reportó el hallazgo de un cuerpo sin vida y en avanzado estado de descomposición, al cual se le aplicaron los análisis periciales y de genética forense correspondientes que arrojaron que se trataba del cuerpo de Sandra.
De acuerdo con el fiscal de Hidalgo, se llevaron a cabo análisis forenses de cámaras de video vigilancia y arcos carreteros proporcionados por el C5i; entrevistas; informes de investigación; procesamiento pericial de domicilios y vehículos; dictámenes en materia de criminalística, lofoscopía, dactiloscopía e informática; así como intervención de comunicaciones autorizadas por un juez de control federal especializado y se contó con la colaboración de la Comisión Estatal de Búsqueda para diversas acciones.
Conforme a los indicios obtenidos en la investigación, el Ministerio Público solicitó la orden de aprehensión contra el probable responsable, de nombre Eduardo, que es la expareja de la víctima, ello por el presunto delito de feminicidio, y el juez de control ordenó se vinculara a proceso.
Finalmente, el procurador señaló: “estos delitos que tanto lastiman a nuestra sociedad, buscamos no queden impunes, y estamos trabajando en la construcción de un sistema de justicia que priorice el combate a los hechos de violencia contra niñas y mujeres y para ello, la denuncia ciudadana juega un papel fundamental”.
SOCIEDAD EXIGÍA JUSTICIA
Desde su desaparición y hasta ahora, amigos, familiares y conocidos de Sandra, quien era madre de tres menores, exigieron justicia y pedían se diera con el responsable, a quien alguna vez vieron golpear a la mujer y después obligarla a subir en la cajuela del automóvil.
Durante todo este tiempo se organizaron marchas de apoyo y exigencia para que el delito no quedara impune, sobre todo porque después de la muerte de Sandra no se supo nada de la pareja sentimental, de quien ahora se sabe fue empleado de la Procuraduría de Justicia de Hidalgo y posteriormente de la Procuraduría General de la República, ahora Fiscalía General.
