El Observatorio de Emergencias Socio-Ecológicas (ODESE), quien genera reportes sobre problemáticas socio-ecológicas que pueden derivar en impactos serios a la salud ambiental, denunció que obras del Río Tula buscan privatizar el agua.
Señala que el proyecto de destrucción del ecosistema del Río Tula que se está ejecutando en este momento para convertirlo en mega canal de aguas negras, talando árboles centenarios, ampliando y revistiendo el cauce con concreto, obedece principalmente al proceso de híper urbanización de la Zona Metropolitana del Valle de México.
Y responde a la necesidad de desalojar grandes cantidades de agua de lluvia que se precipitan sobre la Cuenca del Valle de México, la cual ha ido perdiendo la capacidad de captar, infiltrar, almacenar y recargar sus acuíferos de forma natural con la lluvia.
“Esto debido el desecamiento de la zonas lacustres, disminución de los sitios de regulación y la deforestación de los bosques de captación de partes altas de la cuenca para abrirle paso a la selva de concreto que se sigue expandiendo.”
Señala que gran cantidad de agua, principalmente pluvial, es desfogada por el sistema de drenaje profundo de la Ciudad de México, administrado por varios sistemas operadores: SACMEX, CAEM, OCAVM y CONAGUA, y ha aumentado su capacidad de desalojo con el Túnel Emisor Oriente, inaugurado en 2019 por el titular del actual gobierno federal.
El agua se conduce por el Río Tula hasta la Presa de Zimapán en donde a través de un acueducto se lleva al estado de Querétaro para los grandes usuarios, pero actualmente se está desarrollando un nuevo acueducto y se proyecta un tercero, y a esto se suma la reactivación del proyecto “Monterrey 6” para llevar agua de la Cuenca Pánuco Moctezuma, a la que pertenece el Río Tula, hacia Nuevo León y Coahuila a través de un gran tubo de 600 kilómetros.
Y destaca que este proyecto no obedece a la necesidad real ni de los tulenses ni de los municipios y comunidades por los que atraviesa el Río Tula,en todo su trayecto, “solo quieren usar el río para concentrar el agua que expulsa la megalópolis y llevársela de forma artificial en inmensas cantidades a otros estados.”
Denuncian, además, que el saqueo del agua a través de estas grandes infraestructuras para el uso desproporcionado por parte de los industriales y por el desarrollo urbano de la especulación inmobiliaria, está generando graves desequilibrios hidroecológicos en las cuencas y crisis climática, sanitaria y ambiental en todo el país.
Y hacen un llamado a frenar este modelo de privatización del agua que se está dando en México a través de la CONAGUA.
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