La refinería Dos Bocas en Tabasco, no logrará sacar de apuros ni a Pemex, ni a el Sistema Nacional de Refinación (SNR), pues México aún dependerá de las importaciones.
De acuerdo con analistas, las importaciones tanto de gasolinas y diesel seguirán teniendo un peso importante en nuestro país, ya que se necesitarán unos 200 mil barriles diarios entre 2023 y 2032.
Con ello, ni la nueva refinería en Dos Bocas o toda la producción de Deer Park, en Texas, lograría cubrir la demanda interna de la producción nacional de combustibles.
Los pronósticos de la Secretaría de Energía (Sener), esperaban que la nueva petrolera pusiera a disposición de los usuarios 335.5 mil barriles diarios de gasolinas en 2019; 361 mil en 2020; 396.4 mil en 2021; 476.2 mil este año; 498.5 mil en 2023 y 499.7 mil en 2024.
Desafortunadamente, la realidad es otra, ya que Pemex ha compartido los siguientes resultados:
Durante 2019 la plataforma promedio de producción de gasolinas fue de 203.5 mil barriles; en 2020 fueron 185.6 mil; en 2021 fueron 232.9 mil, y hasta mayo de este año promedia 288 mil.
¿Qué hacer?
Para que se pueda cubrir la demanda interna, se deberían de producir 210 mil barriles diarios para 2024, pero aún echando mano de toda la producción mexicana, apenas se lograrían 163 mil barriles.
Ramsés Pech, analista del sector energético y socio de la consultora Caraiva y Asociados-León & Pech Architects, comentó que en el mejor de los casos, los seis complejos de Pemex podrían cerrar este año al 55% de productividad.
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También señaló que, si el gobierno busca aumentar la exportación de crudo y echar mano de estímulos fiscales para evitar el incremento de la gasolina, el petróleo disponible para refinar será limitado.
México seguirá importando gasolinas para cubrir la demanda con todo y su nueva refinería y Deer Park, coincidió Gonzalo Monroy, analista del sector y director de la consultora GMEC.
