Tras varias semanas de investigaciones, la Fiscalía General de la República (FGR) ha acusado formalmente a cuatro militares por el delito de homicidio de jóvenes acribillados en Nuevo Laredo el pasado 26 de febrero.
De acuerdo con El Universal, la FGR solicita que se fije audiencia para formular imputación contra Agustín “N”, Juan Carlos “N”, Bernardo “N” y Jorge Nicolás “N”.
Aunque tal cual, se busca ampliar el caso contra otros 17 elementos del Ejército.
Este lunes arrancará la audiencia contra los militares en el Centro de Justicia Penal Federal en Tamaulipas, donde se les acusa de los probables delitos de homicidio calificado y homicidio calificado en grado de tentativa.
Sin embargo, los imputados se encuentran detenidos en la prisión militar adscrita a la Primera Región Militar, con sede en la CDMX.
Por desgracia, se dice que no se tiene el equipo necesario para realizar la videollamada hasta Tamaulipas.
Edgar Netro Acuña, abogado de los familiares de las víctimas, expresa que están inconformes porque la FGR sólo realizó la imputación de cuatro elementos de los 21 que participaron.
“En el relato de las dos víctimas directas, Luis Gerardo y Alejandro, sabemos que el resto del cuerpo militar que iba en ese convoy también tuvieron participación, encubrieron a sus compañeros… no hicieron nada para salvaguardar la integridad física de los dos sobrevivientes”.
comentó el abogado
Como tal, se dice que otros 17 elementos están involucrados, aunque posiblemente no de forma directa, pues no brindaron apoyo a los jóvenes atacados.
De igual forma, explica que los cuatro militares acusados podrían alcanzar una sentencia máxima de 50 años en prisión, pero se desconoce la situación de los otros implicados.
Jóvenes asesinados por el Ejército
El pasado 26 de febrero, elementos de la Sedena dispararon contra un vehículo donde viajaban siete jóvenes en la colonia Cavazos Lerma de Nuevo Laredo, Tamaulipas, de los cuales fallecieron cinco, uno resultó lesionado y otro ileso.
En su momento, se creía que los tripulantes estaban armados, pero las investigaciones revelaron que las 7 personas, incluidas un norteamericano, estaban desarmados.
La situación escaló hasta una trifulca entre elementos del Ejército y vecinos, donde se hizo viral en internet una discusión entre ellos donde hubo disparos de “advertencia” contra los residentes.
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